El reconocimiento es una capacidad humana que nace de su estructura psico-física. El hombre es un animal de realidades, que se caracteriza por ser independiente del medio y ejercer un control específico sobre él. El hombre es una sustantividad que, libre de los instintos, se enfrenta a las cosas, a los otros y a sí mismo, como realidades ante las que debe responder haciendo su vida, desarrollando su personalidad.
El hombre no nace predeterminado; su estructura psico-orgánica es inconclusa, y ello quiere decir que es el hombre con su vida quien, instalándose en la realidad, se halla en un campo de posibles maneras de enfrentarse a lo real.
Si el reconocimiento, como dimensión antropológica, se enraíza en el carácter abierto de la realidad humana, el reconocimiento del otro se especifica en la dimensión del encuentro interhumano como un encuentro afectante, lo que explicita es un reconocimiento marcado por la receptividad y la pasividad; los otros constituyen la oportunidad para ratificar el status social logrado.
Cuando nos detenemos entonces a indagar los elementos de nuestra comunicación y sociabilidad atravesando la barrera de lo que consideramos "se da naturalmente" admitimos que como seres humanos necesitamos imperiosamente del otro, no solo para conformar nuestra identidad, sino para mantenerla y ratificarla, y ser autoconcientes de nuestra existencia, por eso cuando deseamos "ser reconocidos" lo que estamos buscando es que tenga sentido lo que hacemos, independientemente de nosotros. Y que en la recepción y el intercambio de nuestros emprendimientos podamos definirnos y encontrarnos, es así que el otro es parte de mi espejo interior y cuando caminamos solos buscamos sino el inmediato, al menos, el mediato momento en que alguien se nos aparezca, o aparecernos ante alguien para relacionarnos, comunicarnos, y reconocernos a partir del reconocimiento del otro.
Como emprendedores y descubridores constantes de nuestras potencialidades, virtudes y objetivos, vamos andando sigilosamente, en busca de conocimientos vastos de nosotros mismos a partir de los demás, por eso no nos alejamos sino para meditar qué somos cuando estamos en compañia y qué queremos ser cuando iniciamos los primeros trámites temerosos de nuestro emprendimiento.
Kristy Saavedra 5c-6Q.
El hombre no nace predeterminado; su estructura psico-orgánica es inconclusa, y ello quiere decir que es el hombre con su vida quien, instalándose en la realidad, se halla en un campo de posibles maneras de enfrentarse a lo real.
Si el reconocimiento, como dimensión antropológica, se enraíza en el carácter abierto de la realidad humana, el reconocimiento del otro se especifica en la dimensión del encuentro interhumano como un encuentro afectante, lo que explicita es un reconocimiento marcado por la receptividad y la pasividad; los otros constituyen la oportunidad para ratificar el status social logrado.
Cuando nos detenemos entonces a indagar los elementos de nuestra comunicación y sociabilidad atravesando la barrera de lo que consideramos "se da naturalmente" admitimos que como seres humanos necesitamos imperiosamente del otro, no solo para conformar nuestra identidad, sino para mantenerla y ratificarla, y ser autoconcientes de nuestra existencia, por eso cuando deseamos "ser reconocidos" lo que estamos buscando es que tenga sentido lo que hacemos, independientemente de nosotros. Y que en la recepción y el intercambio de nuestros emprendimientos podamos definirnos y encontrarnos, es así que el otro es parte de mi espejo interior y cuando caminamos solos buscamos sino el inmediato, al menos, el mediato momento en que alguien se nos aparezca, o aparecernos ante alguien para relacionarnos, comunicarnos, y reconocernos a partir del reconocimiento del otro.
Como emprendedores y descubridores constantes de nuestras potencialidades, virtudes y objetivos, vamos andando sigilosamente, en busca de conocimientos vastos de nosotros mismos a partir de los demás, por eso no nos alejamos sino para meditar qué somos cuando estamos en compañia y qué queremos ser cuando iniciamos los primeros trámites temerosos de nuestro emprendimiento.
Kristy Saavedra 5c-6Q.
Todos los seres humanos necesitamos de los otros, nadie podría vivir sólo, sin tener contacto con alguien, es imprescindible para el hombre interactuar. Nuestra existencia cobra sentido gracias a nuestras relaciones con otras personas, con nuestro entorno cotidiano sea trabajo, el colegio, la universidad, nuestro hogar, nuestro grupo de amigos, vecinos, etc. Sin relacionarnos que triste sería nuestra vida al no poder comunicarnos ni expresar quienes somos, sentimos, pensamos. Tanto el reconocer del otro como el ser reconocido es vital para el hombre, para su desarrollo le da sentido a su existencia.
ResponderEliminarSi, la importancia del reconocimiento del otro también se dá en que esto nos ayuda a autodefinirnos personalmente y que las diferencias que encontramos sean el motivo de inicio de la comunicación entre ambas partes.
ResponderEliminarEl reconocimiento del otro es imprescindible para la formación de cada individuo, es lo que ayuda a definir nuestra identidad, como seres humanos insertos en una sociedad.
ResponderEliminarEste reconocimiento influye en nuestra formación desde un inicio, y lo sigue haciendo, es lo que le da valor y sentido a lo que hacemos diariamente, a lo que recepcionamos y lo que emitimos.
Dentro de la comunicación, es lo fundamental, ya que es la razón de ser de los elementos que la conforman.
Ronald Burgos
5C-6Q
A lo largo de la vida, conocemos a varias personas y aprendemos sobre ellas, así como también aprendemos sobre nosotros mismos, quiénes somos, cuales son nuestras metas, nuestras costumbres, nuestra cultura, los valores que nos han sido inculcados... y es ahí, en el proceso de conocer a las personas, que reconocemos lo positivo y lo negativo de los demás, lo cual hace que uno siga el ejemplo de otro individuo o decida distanciarse, así como también las actitudes que uno mismo ha de cambiar y/o evitar.
ResponderEliminarJulio Carrasco 5C/5Q
Pienso que los seres humanos estamos hechos para vivir en grupos, ya sea en una familia comunidad o en una sociedad, es ahí donde nos identificamos con a los demás, ya sea por cultura costumbre idioma entre otros, como dice el texto "el reconocimiento en una sociedad es muy amplio ya que una misma cultura está dividida en diferentes subculturas."
ResponderEliminarAhora con respecto al tema de diseño, este primero tiene que analizar a estas culturas y sub culturas para poder dirigirse a ellos logrando que la grafica tenga mayor impacto y cercanía con su público consumidor.
Se nos reconoce por como actuamos por como somos ante los demas, cada uno de nosotros tenemos distintas costumbres que nos identifican. Este reconocimiento va creciendo junto con nosotros desde que empezamos a formarnos hasta que llegamos a formar nuestro caracter. Es por eso que cuando nos relacionamos con distintas personas, si bien existen cosas en las que podamos coincidir, la mayoria son distintas, esto hace que exista el interes por conocer mas sobre los demas.
ResponderEliminarLos Seres humanos desde que nacemos estamos en contacto con otras personas, durante el crecimiento y desarrollo cada persona adquiere conocimientos y valores de las personas con las que se relaciona y del entorno en el cual se desenvuelve partir de estos conocimientos puede reconocer diferenciar a las personas, por los que podríamos decir que mientras más grande sea el conocimiento y desarrollo como ente social mayor será su capacidad de reconocimiento y mejor aún mientras más sea capaz de reconocer y diferenciar, éste individuo a la vez será más reconocido.
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